España 3 – 2 Suiza: Otra victoria en el año mágico
La selección vivirá un año mágico, el de la Eurocopa y el entusiasmo popular, con otra victoria. Trabajada y sufrida, pero electrizante por la emoción final (3-2). un oro de Bryan Zaragoza durante la prórroga que golpeó a Suiza en la última jornada de la Liga de las Naciones.
En el primer puesto del grupo asegurado, desde hace un tiempo los atletas en discusión, los nuevos jugadores de la selección se encuentran con el aliciente en la guardia de las cuestiones que parecen menores: la defensa de la camiseta, el compromiso con su país, aumenta el nivel requisito. máximo que se pedirá para encontrar el equipo de todos. Pinceladas para ornamentar un partido sin fuste, en el que Suiza no pinta mucho, ni ganas parece tener.
luis de la fuente Es como estos centrocampistas nucleares que siempre están al frente de lo que está sucediendo. Sensación, coherencia, normalidad de acción. Deportistas que buscan solucionar y que no pueden llevar la pelota, como si fuera un problema, con otro amigo. En Tenerife, el técnico ha decretado un completo equipamiento de novedades y convocatorias que requieren minutos y un examen detenido de sus capacidades.
Comienzo paredesel centro del Athletic, juega al final mingueza Después de tres citaciones, siendo titular para el técnico azulgrana Marc Casadó, Yeremy Pino recibió otro pase para demostrar sus capacidades, Remiro defendió al portero tras cinco titularidades para David Raya… Se fue a la fiesta.
Resulta que en el fútbol no se vive lo mismo, y que no se activan las mismas causas de creatividad. Alguien recurre a la chirría cuando Remiro tiene la impresión de perder tres balones en los últimos minutos porque el balón no se vende limpio desde atrás. Sin complejos, España tomó el balón para que Morata se lo hiciera o Nico Williams se encargó de recuperarlo en la segunda parte.
España genera ocasiones desde el inicio, porque, como siempre, la presión es muy fuerte, rota con frecuencia cerca del área rival y obtiene situaciones de tiro ventajosas. Grimaldo, Nico y Pedri pueden marcar con prontitud, pero el gol no está ahí hasta que Morata se inventa el medio término para elevar el balón encima de la cabeza de un rival y el tema cae en zancadilla.
moratamientras De la Fuente aborda cada cuestión del periodismo como si fuera la reencarnación de Santa Teresa, cediendo el penalti a Pedri mientras éste pide la graduación por tema paisajístico. Se propaga la ley de Murphy, según la tostada siempre por el lado del abrigo. Falla pedri el lanzamiento, como esta canción, y luego otra vez Yerémyen otras partes de Canadá, empalma roja.
Suiza no existe, Remiro es un mayor espectador, el partido oficial no da nada por mucho, y el aliciente viene tras el descenso. Siempre le interesa más el enigma de la noticia que la repetición del conocimiento, para muchos Morata eso empieza por la selección. samuel chico que vino en España en la búsqueda de su madre de una vida mejor desde Nigeria.
El segundo periodo comienza con las pifias de Paredes, central del Athletic. Primero monteiro Caerá después de la descarga. La segunda vez, el atacante sacó el balón de la cola tras haberse impuesto en la carrera ante Grimaldo y en una defensa equívoca de Paredes. Únete a una fiesta insulso que, por supuesto, está dirigida a jóvenes y principiantes.
La selección finaliza el encuentro con un nuevo y refrescante invitado, Bryan Zaragoza, Samu y Bryan Gil. Dos regateadores por las bandas, espaldas que suben al nivel con sus puntas y sus recorridos, y un finalizador de apariencia polifacética que pega cochinillos. Una alternativa concluyen Lamine Yamal, Nico y Morata.
Bryan Gil expresa el sentimiento de estos partidos, donde nunca está jugando con la ambición de lo que quiere entrar al mundo. El delantero andaluz gerundense robó un balón ante la flaqueza de las defensas suizas y se derrumbó con la potencia del balón. El partido no está condenado porque una patada de Fabián a Sierra fue penalizada con una transformación Zeqiri. Y en la prórroga, la sentencia: penalti a Bryan Zaragoza que lo convierte en victoria.