Rodri Hernández ganó el Balón de Oro y jugó 60 años seguidos en el fútbol masculino español
Rodri Hernández Esta es la historia del fútbol español. El centrocampista se proclamó ganador del Balón de Oro y pudo culminar la mayor parte de sus décadas de balompié nacional en el prestigioso Balón de Oro masculino, desde que Luis Suárez lo conquistó en 1960.
El motivo principal, ser campista de la Eurocopa, elegido mejor jugador del torneo, el jugador y líder dentro y fuera del campo de la mejor selección, por el juego y los resultados, del Viejo Continente. Un trío colectivo de quienes coinciden con el perro, con la mención de tres números en particular. Luis de la Fuente, “por su confianza desde el primer día”, Carvajalque sufrió la misma lesión que Rodri y que «la madre ahora está como ganadora», y Lamine Yamal, que se comprometió a «seguir trabajando duro» para que la continuación española no dure sus otras décadas.
Más allá del escenario que centró a todos los locales ayudados por las muletas, por la lesión del cruzado que le mantuvo sin jugar toda la temporada, y con los ojos brillantes, Rodri dijo algo incrédulo hoy en el trofeo de tan ansiado. Su primer recuerdo, para su futuro más cercano, desde su joven con el que estuvo precisamente este año juntos, hasta su familia, el responsable del molde hasta convertirse en él. “Agradecido por los valores que tengo y los que me representan, sin duda, para seguir los pasos correctos”, se mantuvo.
Asimismo entregó su triunfo como trío colectivo del balompié nacional español. “No, ella es una Victoria Solo Mía, es toda el fútbol español.. Se ven recompensados a tantos jugadores que no lo han ganado, como Xavi, Iniesta, Iker (Casillas), Busi (Busquets), no quiero dejarme a ninguno”. Además de las ciudades madrileñas, que sufrieron por parte del joven jugador la lucha desesperada entre Messi y Cristiano, Butragueño, Míchel, Fernando Torres y, sobre todo, Raúl, se encontraron a las puertas del ascensor del Balón de Oro. . Una continuación que se prolongó hasta que los llegados desde Madrid profanaron a un Tal Rodri, convertido en Don Rodrigo. Un jugador de época, un magnífico central del campo, que perdió su depreciación durante más de seis décadas y cobró la deuda del jugador más prestigioso con el fútbol español.
Jugado deportivamente en el escenario del Atlético de Madrid, se marchó al Villarreal, donde su éxito como futbolista vivió su momento, como la historia de estas lunas en la gala. “Hace 17 años tuve los hombres para cumplir mi sueño de jugar en Primera. Pero un dia dice basta. Llamo a mi padre feliz con la sensación de que todo estaba hecho, que había revertido toda mi vida para seguirlo y que el sol me pasaba de largo. Me digo a mí mismo que no puedo tirar la pelota y que tengo que seguir hasta la final. Desde ese día cambié mi mentalidad hasta aquí”.
Se trata de descubrir en qué se diferencia un futbolista de Madrigal, lo que llevará al Atlético a replantearle. Un paso temporal en el Metropolitano fue suficiente para que Guardiola desembolsara 70 millones de euros. En el Manchester City alcanzó la grandeza. «Estoy en el mejor club del mundo, y gracias a todo esto es el más fácil», dijo Rodri a su entidad.
El querer madrileño también destacó la posición de centrocampista, tanto alejada del foco como merecería. “Muchos hemos hecho el trabajo sucio et gracias a este premio todo ese trabajo ha salido a la luz”, sentencia.
Asimismo, Rodri tomó forma como ser. Una personalidad de “opinión rara” en el mundo del fútbol, que parecía que las posibilidades restaba de cara alos galardones individuales y copar los grandes objetivos. Sin embargo, se ha demostrado que podría ser todo lo contrario. “Un chico normal, con valores, que estudia, que no se queda en estereotipos, puede jugar aquí y ser el mejor jugador del mundo.», concluyó.
Aitana Bonmatí mantiene la gloria del fútbol femenino español
Por tu parte, sigue el fútbol femenino español cuando las jugadoras se pelean. Aitana Bonmatí desplazó a su antecesora Alexia Putellas y ganó su segundo Balón de Oro consecutivo, aumentando a cuatro de las jugadoras que han sido mentoras de los futbolistas nacionales. Campeón de todos con el Barcelona, goleador y mejor jugador de la final de Champions, ganador de la Nations League con la selección, se mantiene un año más como el mejor futbolista del mundo.
Buscando las grandes opciones que tenía, ningún técnico español fue capaz de recuperar el reconstruido trofeo Johan Cruyff. Los acuerdos carlo ancelotiCampeonato de Liga y Champions, y Emma Hayes, selección nacional y campeonato olímpico de París, fueron las mejores entrenadoras de la pasada temporada.
El primer galardón de la noche parisina llega desde el trofeo Kopaquien como era de esperar fue premiado por Lamine Yamal como el mejor jugador menor de 21 años, convirtiéndose así en el más joven de la historia al ganar sus primeros 17 años. Su actuación durante la Eurocopa le catapultó a la estrella mundial y, confirmándole como el mejor jugador del mundo, Drogba, presentador de la gala, presentó una posible vuelta al ganador: superar a Ronaldo Nazário como Balón de Oro el más tempranero. de siempre.
Durante la caída del jugador del Barcelona del escenario, se sumaron a su presidente Joan Laporta y a su colega Alexia Putellas como representantes del mejor club femenino. Premio indiscutible para el histórico vencedor conquistado por Jonatan Giráldez, Champions y Liga incluida. Le siguió el Real Madrid, nombrado mejor club masculino, también rey de Europa y de España, pero ganó el trofeo físico gracias a la fábrica de clubes blancos.
Una circunstancia que fue recogida por el premio Gerd Müller, que se llevó el máximo goleador de la temporada. kane Sí Mbappé Agradecieron a los coganadores su comida de 52 goles en la pasada campaña, pero sólo el alemán reconoció el galardón. En la zona ocupada del campo, Lev Yashin, elegido como mejor portador, fue por segundo año consecutivo para Emiliano. ‘Dibu’ MartínezCampeón de la Copa América ante Argentina y jugó un papel clave en la salida de Emery del Aston Villa.
En el único episodio extradeportivo de la gala, Jenni Hermoso sucedió a Vinicius como ganador del Premio Sócrates, que valora el compromiso de los futbolistas para construir una sociedad más justa e inclusiva. En su discurso, la jugadora española pidió un fútbol “libre de prejuicios y violencia de género”.